"STAT ROSA PRISTINA NOMINE, NOMINA NUDA TENEMUS"

"STAT ROSA PRISTINA NOMINE, NOMINA NUDA TENEMUS"

El blog de Pelayo Castillo Palacios

sábado, 22 de octubre de 2011

LA PUERTA DEL BUEY DE MANUELA

            No he podido resistir la tentación de publicar como artículo el comentario que me manda Manuela a SOY DE PUEBLO ¿Y QUÉ? Creo que refleja el cariño inmenso que tenemos a nuestro pueblo en general y a algunos lugares en particular. Te estoy enormemente agradecido por escribir en el blog Manuela, para no estropear tu texto te contestaré en los comentarios. Besos.

Manuela ha dejado un nuevo comentario en su entrada "SOY DE PUEBLO ¿Y QUÉ?": 

Yo que soy una romantica, te contaré que a mí la Puerta del Buey me tiene hechizada, te cuento, cuando era una niña me iba todas las tardes a ver pasar el tren, no se explicar el porque pero llegaba la hora y parecía que alguien me llamaba, allí estaba yo mirando el río y aquel tren que bajaban los viajeros cada uno contandose sus cosas, venían riendo con sus compras y los chavales de estudiar con sus mochilas, no se como pero para mi tenía un gran encanto.
Ahora ya de mayor cuando me pongo en la misma puerta y veo esa bajada llena de arboles, me parece que he entrado en una película, pero un día me quede prendada del todo, bajaba yo en coche y en una de las alcantarillas estaba sentado Manuel Guillen padre con su perro a los pies, el leía el periodico, el animal lo miraba, a mi se me vino al pensamiento esos cuadros que antes había en la casas el del cazador con sus perros y me quede (como se suele decir) hecha una pieza, que estampa tan bonita, siempre que bajo se me viene a la mente esa estampa.
Y que me dices de esa casa de Juan breva alla en lo alto, siempre he dicho que si tuviera dinero la compraría me hechiza y no se porque.
En fin Pelayo somos algunos en nuestro pueblo que estamos enamorados de esa puerta, algo tendra no? 



7 comentarios:

  1. Lo prometido es deuda.
    Me has llamado la atención sobre algo que me ha hechizado desde siempre: el tren; cuando niño porque nos gustaba ver las personas que se bajaban, si no eran de Niebla adivinar donde iban o desde donde venían, en qué trabajaban, en resumen inventarles una vida siempre lejana y cuanto más exótica mejor, de forma que algún día nosotros mismos podríamos coger ese tren que nos llevara a tierras de fantasía. Algunos años más tarde mi trabajo me convirtió en uno de esos viajeros, no me avergüenza decir que alguna vez que otra, después de interminables meses fuera, cuando cruzábamos el Tinto la "Torre del Oro" se hacía borrosa con la humedad de los ojos, a continuación el "Apeadero Puerta del Buey" me acogía de nuevo.
    Siempre me ha gustado relacionar nuestros abuelos con la puesta de sol (en Niebla especialmente bella desde esta puerta) toda la dorada ternura de nuestros ancianos que en el ocaso de su vida se despiden, a su manera, del sol que les ha acompañado en innumerables jornadas de trabajo en el campo. Para mí esa es la estampa.
    De nuevo gracias por compartir tus sentimientos iliplenses con nosotros, siéntete en casa y escribe cuando quieras.
    Besos

    ResponderEliminar
  2. Yo cogía cada quince días ese tren para ir a Sevilla a ver a mi abuela, y cada vez que regresábamos, el domingo,recuerdo que ya desde La Palma se veían las canteras donde trabajaba mi padre, y cada vez, cada vez, sentía una emoción en el pecho que puedo evocar como si la sintiera en este instante. Años después, cuando volvía a Niebla de visita, antes de La Palma ya estaba pegando la nariz al cristal de la ventanilla, y siempre me bajaba llorando. Cuando quitaron el tren y ya sólo puedo llegar desde la autovía, sentí como si me hubieran arrebatado algo tan lleno de belleza como la noche de Reyes.
    La Puerta del Buey ha cambiado mucho, con el paseo de los árboles que antes no estaba, pero siempre será la misma, dorada, sí, acogedora, amante. Yo, que la subía cada día (igual que Nuria, tu mujer) para ir al colegio, la amo tanto como al río y forma parte de mí.
    Y, Pelayo, ¿podrías algún día poner alguna foto del colegio visto desde el patio, con las ventanas, ahora rotas, de nuestra clase de séptimo y octavo? Se me estropeó la cámara justo al hacer esa foto y me gustaría mucho tenerla para hacer una entrada que voy posponiendo por miedo al efecto que sé que me va a hacer escribirla. Si algún día te acuerdas y la pones, o me la envías, te lo agradecería muchísimo.
    Besos apretaos.

    ResponderEliminar
  3. Estas vivencias estos recuerdos, que de vez en cuando lee uno me hace recordar.Se abre la puerta de ese baul que dentro de la mente tiene uno cerrado y olvidado quizas por muchos motivos,la vida que llevamos, la situacion ,la politica en fin, cada persona es un mundo.Pero llega cosas de estas que te hacen recodar de lo que hemos perdido o mejor dicho lo que nos estamos perdiendo en no saber aprovechar estas cosas que quizas si le buscaramos algun pequeñito lugar en nuetro que hacer diario nos haria un poco mejor y quien sabe quizas u poco mas sociables ante tanta hipocresia como tenemos ahora.
    Esta cosas que se lee de vez en cuando me hacen reflexionar y querer aun mas a mi pueblo, a nuestro pueblo.

    ResponderEliminar
  4. Amigo Pelayo, me he tomado la libertad de llamarte amigo,porque desde que iniciastes este blog te estoy siguiendo, nunca me he atrevido a escribir nada, (quizás por no caer en el ridículo)cuando leí el comentario de la Puerta del Buey no me pude resistir,me gusta escribir, aqui me siento un poco intimidada, se que te ha gustado y hala aqui me tienes perdiendo un poco la verguenza.
    El llamarte amigo, es que poco a poco has ido dejando entrever tus inquietudes, sentimientos tu buen saber sobre Historia, ya que me gusta mucho leer y enterarme de cosas que desconocia, tambien debo decirte que no soy muy de ordenadores, pero cada vez que entro me lo leo todo del tirón.
    No soy muy erudita a la hora de escribir los textos, hace ya tiempo que deje de escribir cosas bellas, algun día cuandpo tenga tiempo volveré a hacerlo.
    Gracias por editar mi comentario me ha gustado.
    Hasta pronto.

    ResponderEliminar
  5. Jana, el tren, por suerte, sigue pasando por Niebla, bastante menos que antes, pero lo suficiente como para quitarse el mono de vez en cuando (a mis hijos les encantó no hace mucho cuando vinimos desde Sevilla)me has recordado a mi hijo Gonzalo con la nariz pegada al cristal alucinando con los paisajes.
    Por supuesto cuenta con las fotos, en cuanto pueda te las mando.
    Gracias amiga

    ResponderEliminar
  6. Antonio, no tenemos porqué perder estos momentos y sabores agradables a la mente, tú mismo lo has dicho, la vida nos conduce a toda velocidad y casi siempre hacia lugares que no hemos previsto; pero un pequeño paseo y cerrar los ojos durante cinco minutos es un privilegio del que nada ni nadie nos puede privar. Sigue disfrutando de tú/nuestra tierra.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  7. Manuela, amigos son aquellos que comparten lo intangible, los sentimientos, los deseos, las inquietudes... cosas que no podemos adquirir en el Carrefour; por lo poco que he leído de ti creo adivinar que tenemos algunos en común.
    Te comprendo cuando dices que te sientes intimidada, me sucede lo mismo cuando dejo mi comentario en el blog de Jana, entre verdaderos artistas de la palabra. Cada uno es como es y debe ser apreciado por ello, no por lo que aparente. Muchas veces he escrito que este blog es mi "cuaderno de bitácora", mi diario; de hecho, cada vez me atrevo más a descubrir mi alma, supongo que con el tiempo que llevo escribiendo os considero mis fieles lectores. Si te gusta escribir: lánzate, seguro que encontrarás almas afines, si aún no quieres dar ese paso te reitero mi invitación, pasa y considérate en casa.
    Un afectuoso saludo.

    ResponderEliminar