Hace unos años, por circunstancias que muchos conocéis,
decidimos conmemorar el cumpleaños de los seres queridos que se han ido, en vez
de la fecha de su muerte.
Hoy es 10 de enero, y mi hermano Merce habría cumplido
45. Creo, o quiero creer que estará en algún lado, con una cerveza en la mano y
escuchando música a todo volumen, probablemente algún buen grupo Heavy, de los
clásicos, mientras saborea un cigarrillo, al fin y al cabo donde estés no te va
a hacer daño.
He elegido este tema por muchas razones, la del título y
letra es obvia; pero me enseñaste a apreciar esa “música estridente”; es un
tema que me recomendaste en muchas ocasiones, cuando me hablabas de una
historia entre una banda de rock y el componente que la abandonó, hasta ahora
nunca la había escuchado completa.
Allá donde estés disfrútala…
Un abrazo fuerte, siempre.
Tu entrada me ha emocionado y me ha hecho sentir muy cerca de tus sentimientos, yo también celebro un poquito los cumpleaños de mis seres queridos ausentes, y tu idea de tu hermano con la cerveza y el cigarrillo en la mano, en un bar celestial heavy, me ha hecho pensar que ojalá sea así, y que ¿por qué no? tarde o temprano creo que tendremos que encontrarnos con aquellos amigos, compañeros, vecinos, de antes, y con todo el tiempo del mundo por delante para vencer incomprensiones.
ResponderEliminarBesos apretaos, amigo.
Mi hermano era uno de mis lectores más incondicionales, me gusta pensar que sigue leyendo todo lo que escribo, puede que tan sólo sea una ilusión, un deseo para nosotros mismos, por lo menos en mi caso me gustaría ser recordado por aquellos que me conocieron.
EliminarHasta la muerte de mi hija fui un agnóstico convencido, pero todo cambió y sentí que necesitaba creer en algo que esté "al otro lado del silencio", como dice la canción.
Gracias amiga por tus besos apretaos, enero es un mes muy duro en casa.
Recibe los míos igualmente Jana.